11 de enero de 2007

Rayo Vallecano de Madrid 0, Sevilla Fútbol Club 0.

"Anarroseo" la crónica del maestro Alvarado para el partido de ayer; sin duda el peor del Sevilla en todo el año. Como dijo mi padre ayer: "La mujer del César no solo tiene que ser decente, también tiene que parecerlo".
En mi opinión, el Sevilla tiene buenos suplentes, menos cuando juegan todos a la vez.
Os dejo con el Maestro.

El partido ha sido tela de malo.
Once jugadores distintos respecto a los once que saltaron al campo en Zaragoza.
Nada que ver una cosa con la otra.
La primera parte fue mala, pero al menos no se temió en ningún momento por la integridad de la portería de Cobeño y Chevantón lanzó al larguero en una falta directa.
La segunda parte, horrorosa e incluso en el tramo final del partido el Rayo nos metió en nuestra portería y pudo marcar en un remate de cabeza a placer de Diego Torres que Cobeño detuvo con seguridad.
Fue la única intervención del guardameta sevillista.
Empate a cero y a esperar el partido de vuelta dentro de una semana. Yo no temo por la eliminatoria, pero tampoco la veo ganada.
No la veía ganada antes de empezar hoy, así que después de lo que hemos contemplado en el irregular terreno de juego de Vallecas, mucho menos.
Con todo, el mayor susto me lo dio Alves cuando parecía que, por sus gestos y por su abandono de la carrera, parecía que se había roto muscularmente. Al parecer lo que tiene es un golpe en la rodilla que, al continuar en el partido el brasileño, hace pensar que no será nada problemático.
Dentro de una semana, 21´00 horas y los socios pueden entrar con el carnet, habrá que pelear a cara de perro un partido en el que hay que ganar. No queda otra.
Cualquier otro resultado nos deja fuera.
Y no olvidemos que este mismo Rayo dejó en la cuneta al actual campeón, el Espanyol, y lo hizo empatando el primer partido de la eliminatoria a uno en Vallecas.
Ahora, sólo cabe pensar en el Mallorca y en seguir siendo líderes de la Liga de las Estrellas.
Ya llegará el miércoles.

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